Cuidando su traje a medida

Creemos firmemente que un traje personalizado hecho a mano y que le quede bien es una inversión. Es necesario cuidarlo para alargar su durabilidad y longevidad. Si un traje se cuida bien, funcionará bien y lucirá genial durante toda su vida. Aparte de algún derrame ocasional o un bolígrafo con fugas, un traje soporta factores cotidianos como la humedad, la exposición a contaminantes y la transpiración. Un traje que no ha sido bien cuidado también puede acortar su vida útil, afectando su forma, textura e incluso color. En este artículo, describimos los pasos que puede seguir para garantizar la longevidad de su traje.

Cuando la amenaza de daño permanente parece grave, el mejor curso de acción es contratar la experiencia de una tintorería de confianza. Sin embargo, como dice el refrán popular, “más vale prevenir que curar”. Los siguientes sencillos pasos le ayudarán de forma proactiva a conservar su traje.


El cepillo es tu amigo

Antes de colgar el traje, conviene cepillarlo rápidamente. Cepillar el traje es un método eficaz para eliminar el polvo, las partículas y la suciedad no deseados antes de que se depositen en la tela, lo que provoca la pérdida de la integridad del traje con el tiempo. Un cepillo para ropa hecho de fibras naturales o pelo de animal es tu mejor opción. No se recomienda el uso de un rodillo de pelusa porque el material adhesivo puede adherirse a la tela y causar daños considerables.

Ventilación

Un traje no debe desaparecer en el armario inmediatamente después de haberlo cepillado. Es mejor dejarlo ventilar un rato junto a una ventana abierta o en el baño. Mantenga sus trajes en un lugar donde puedan respirar. Nuestros trajes están hechos de fibras naturales, que requieren la circulación del aire para mantenerse frescos. Tenga en cuenta que guardar un traje en una bolsa hermética para guardarlo puede parecer una buena idea, pero no se sorprenda si encuentra moho o incluso polillas comiendo su chaqueta favorita.

Evite el calor

El ligero brillo que puedes ver en los hombros y las solapas de tu traje se debe a un planchado excesivo o a una limpieza en seco descuidada. La exposición a altas temperaturas hace que las fibras naturales se derritan y suavicen, creando así un brillo. Nunca planches tu traje directamente y asegúrate de usar calor bajo cuando lo dejes en la tintorería.

Guarde el club soda para cócteles

La mejor manera de contrarrestar una mancha nueva es secar inmediatamente la superficie con un paño blanco seco. Usar agua solo hace que la mancha se fije más rápidamente. A pesar de la evidente inclinación a hacerlo, frotar sólo daña la tela. Todas las manchas difíciles deben ser tratadas por un limpiador profesional.

Prepárese para todas las estaciones

Si reside en un área geográfica que tiene cuatro estaciones distintas, es importante lavar en seco sus trajes antes de guardarlos (es decir, si los guarda en una bolsa para trajes a principios de primavera u otoño).